En coordinación con la Delegación Presidencial Regional de Tarapacá, el Departamento de Migraciones y Policía Internacional Iquique (DEPI), dio cumplimiento a la expulsión judicial de 117 personas, entre ellos, 17 hombres y mujeres de nacionalidad colombiana y venezolana, quienes se encontraban recluidos en cárceles de la región.
El delegado presidencial (s), Natan Olivos, reiteró que como gobierno “seguiremos trabajando en esta línea, haciendo cumplir la normativa de nuestro país. Y en ese sentido es muy importante mencionar que hemos seguido trabajando con el control de fronteras y por supuesto seguiremos con los procesos de expulsiones, cumpliendo con todos los protocolos establecidos”.
Estas expulsiones, obedecen a la tarea permanente de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), de dar cumplimiento a sentencias judiciales que las ordenaban, puesto que, desde Tarapacá, 6 de ellos y ellas eran de nacionalidad colombiana y 11 de nacionalidad venezolana, con edades entre 18 y 50 años, todos condenados por infracción a la ley 20.000, tráfico ilícito de drogas.
El prefecto Cristian Lobos, jefe de la Región de Tarapacá de la PDI, explicó que estos extranjeros, se acogieron a un beneficio que les otorga el Estado chileno, amparado en la ley 20.603, artículo 34, la cual se basa en una pena substitutiva que señala que toda persona extranjera que tenga una condena inferior a cinco años se puede acoger al beneficio de computar su pena y acogerse a la expulsión del territorio nacional. Esto coordinado por los Tribunales de Garantía de las regiones correspondientes.
La PDI, posee 88 años de experiencia en control migratorio y policía internacional, área que se preocupa de fortalecer día a día tanto para brindar seguridad y tranquilidad a la ciudadanía, como a su vez, para hacer de Chile un mejor país.
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