El 144° Aniversario del Desembarco, Asalto y Toma de Pisagua se conmemoró en el histórico puerto, con una breve pero solemne ceremonia que recordó el inicio de la Campaña de Tarapacá, en la recordada Guerra del Pacífico.
A la actividad, que fue presidida por el delegado presidencial regional de Tarapacá, Daniel Quinteros, contó con la presencia del comandante en jefe de la VI División de Ejército, general de brigada Lionel Curti Santibáñez, el alcalde de Huara, José Bartolo Vinaya, el comandante en jefe de la Cuarta Zona Naval, contraalmirante Claudio Maldonado Naveas, como también con autoridades civiles, militares, de la PDI y de Carabineros, además de parte de la comunidad del otrora puerto salitrero.
Fue así como en la ceremonia, que se efectuó en el monolito recordatorio ubicado en el sector de Playa Blanca y que marca el histórico acontecimiento, se rindió honores a los caídos en batalla -de ambos bandos- con la entrega de ofrendas florales por parte de las autoridades presentes, quienes llegaron al lugar donde las fuerzas chilenas realizaron el primer desembarco anfibio de la historia moderna.
En este contexto, representantes de la Policía de Investigaciones, Carabineros, Fuerza Aérea, Armada, Comando Conjunto Norte, Municipalidad de Huara y el Ejército de Chile, depositaron sus ofrendas en el sitio histórico, destacando la importancia del acontecimiento hasta nuestros días.
El delegado presidencial regional de Tarapacá, Daniel Quinteros Rojas, señaló: “Conmemoramos un año más del desembarco y la toma de este puerto histórico para la región y para el país, que marcó de manera decisiva el curso de la historia y particularmente de la Guerra del Pacífico. Sin el desembarco, probablemente las tres regiones del norte no serían parte de nuestro país y por lo tanto como tarapaqueños tenemos que estar muy agradecidos de la gesta heroica de esos valientes soldados, que además trabajaron en conjunto entre la Armada y el Ejército para lograr objetivos comunes. Creo que esa memoria, esa conmemoración, nos debiera marcar también el sentido del futuro, en que tenemos que trabajar juntos con objetivos comunes y con métodos comunes, así que muy contento de poder participar en esta nueva ceremonia y esperamos que podamos seguir conmemorando esto por muchos años más”; puntualizó Quinteros.
En tanto el comandante en jefe de la VI División de Ejército, general de brigada Lionel Curti Santibáñez, puso en valor el sentido de la actividad, recordando que “ese 2 de noviembre se inicia la Campaña de Tarapacá, una de las más importantes de la Guerra del Pacífico y quiero resaltar que es un trabajo que une a la Armada de Chile junto con el Ejército, en una proeza que fue considerada como el primer desembarco anfibio de la historia moderna. Creo que este hecho, demuestra la capacidad que ya hace 144 años atrás, tenía tanto la Armada como el Ejército, para trabajar en forma conjunta. Eso es lo que quiero destacar, aparte de la relevancia histórica, ya que hablamos de las capacidades que ya, en aquel entonces y hasta la fecha, tenemos las Fuerzas Armadas para trabajar en forma conjunta, en beneficio de nuestra Patria”; comentó Curti.
Asimismo para el comandante en jefe de la Cuarta Zona Naval, contraalmirante Claudio Maldonado Naveas, la actividad tiene una gran relevancia desde el punto de vista histórico, considerando que “llegamos a Pisagua para conmemorar los 144 años del primer desembarco anfibio de la era moderna y que sentó las bases para poder desarrollar e iniciar la campaña terrestre en la Guerra del Pacífico. Para ponerlo en contexto, tenemos que decir que el 8 de octubre, con la captura del Huáscar, Chile conquistó el dominio del mar y eso nos permitió planificar esta operación anfibia e iniciar la campaña terrestre para poder, finalmente, lograr la victoria en la Guerra del Pacífico. Hoy, en un día maravilloso, nos damos cita con autoridades civiles a esta importante ceremonia que nos dio el dominio finalmente de estos terrenos del norte que, junto con el salitre y el cobre, nos han dado una proyección, y nos han dado estabilidad. Por lo tanto, es un deber que tenemos, junto a las otras instituciones de la Defensa, mantener la soberanía en estos territorios, que fueron conquistados con sangre, sudor y lágrimas, por nuestros antepasados”; puntualizó Maldonado.
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